EL VERANO SE ACERCA Y PARA MUCHOS ESTO SIGNIFICA VACACIONES EN FAMILIA O QUIZÁS VIAJES AL EXTRANJERO PARA APRENDER SOBRE UNA CULTURA DIFERENTE A LA NUESTRA. PARA ALGUNAS PERSONAS EN NUESTRA DIÓCESIS, EL VERANO SIGNIFICA CAMINAR Y APRENDER MÁS SOBRE NUESTRA FE, PERO NO POR MEDIO DE LIBROS Y CLASES SINO POR MEDIO DE LA ACCIÓN.
Como quizás se sepa, a nuestra diócesis cada verano vienen campesinos migrantes para trabajar en las cosechas en los campos de cultivos tal como en el espárrago, la fresa, blueberries, y otros más. Hay un total de aproximadamente 300 campos en los 9 condados de la Diócesis de Kalamazoo. Aunque los campesinos migrantes llegan a todos los nueve condados, la gran mayoría llegan a los condados de Allegan, Berrien, y Van Buren. Estos condados son los que están mas cerca del lago y donde está la gran mayoría de los cultivos.
Hemos tenido el gran privilegio de que, desde el inicio de nuestra Diócesis, se ha tenido la misión de acompañar a los campesinos durante el verano para que sepan que su Diócesis de Kalamazoo está aquí para apoyarlos en lo que necesiten y que no están solos. No importa si son católicos o no, nuestra misión es de acompañarlos y apoyarlos. Cada Caminoverano por medio de la oficina del Ministerio Hispano se traen sacerdotes y hermanas religiosas para fortalecer este ministerio de acompañamiento y poder visitar a cada uno de estos 300 campos. Además del grupo diocesano, varias parroquias tienen grupos de voluntarios quienes también visitan los campos. Las visitas se hacen durante un día de la semana comenzando finales de junio y todo julio y/o agosto. Las visitas no son de más de una hora máximo para no alargar más el día pesado de trabajo y simplemente son para conversar un poco y conocer mejor a las familias y hombres quienes han llegado a nuestra diócesis. Estas conversaciones son muy enriquecedoras y varias de las personas que son voluntarios han expresado que muchas de las veces uno aprende y recibe más de lo que ofrece. Es un tiempo para encontrarnos con Jesus en medio de cada uno de nuestros hermanos y hermanas migrantes que, con todas las dificultades, el gran cansancio y a veces carencias, son las personas más alegres y agradecidas con Dios. Aquí es donde por medio de una acción tan pequeña, se fortalece nuestra fe y la misión que nos ha confiado Dios de acompañar, evangelizar y ser evangelizados. Un simple juego para pasar el tiempo, alguna lectura o charla bíblica o simplemente estar allí presente para escuchar tiene un impacto mayor de lo que uno se puede imaginar.
Los invito a que este verano no tomen vacaciones de su fe si no que, así como los discípulos en el camino a Emaús, en cualquier lugar que nos encontremos, estemos abiertos para encontrarnos con aquel desconocido quien caminando y acompañándonos hace fortalecer nuestra fe.
Que Dios todo poderoso guie y otorgué las palabras necesarias a cada una de las personas quienes estaremos visitando y acompañando a nuestros hermanos y hermanas migrantes en este verano 2022.
**** El Centro Alemán, localizado en la Parroquia de la Inmaculada Concepción, Hartford, MI, durante los meses del verano ayuda a las familias migrantes que están en necesidad de comida y algunos artículos. Todo es gratuito. Lleva este nombre en honor al Diácono Eugenio Alemán de origen mexicano y quien dedicó su vida a la ayuda de las personas recién llegadas al área o que necesitaban algún tipo de ayuda. Maggie Ebrite de la Parroquia de St. Thomas More, Kalamazoo, es la coordinadora del centro y el centro cuenta con voluntario de St. Thomas More, Kalamazoo y St. Martin of Tours, Vicksburg. ***